¿Alguna vez os habéis despertado sonriendo? Alguno pensará , qué significa despertarse sonriendo. Para poneros en situación os voy a contar una pequeña fábula…

Se dice que el discípulo de un venerable sabio, estaba extrañado y sorprendido de que su maestro estuviese siempre sonriente y feliz, a pesar de las dificultades que tenía en la vida.

Intrigado, un día, le preguntó:

– Maestro, ¿cómo es que siempre se te ve tan contento y satisfecho?

El maestro le respondió:

– Amigo mío, no hay secreto alguno en esto
– Cada mañana cuando me despierto, me hago la misma pregunta a mí mismo.
– ¿Qué escojo hoy? Alegría o tristeza?
– Y siempre escojo alegría.

El secreto de despertarse sonriendo esta basado en el mismo principio escoger en cada momento cual es tu estado…

Todo comenzó por casualidad en uno de esos días que parece que nada sale bien, que todo está en contra tuyo, uno de esos días que todos tenemos. Uno de esos días que deseamos que acabe para al día siguiente poder comenzar de cero otra vez…

Se me ocurrió una idea sencilla, ¿por qué esperar al día siguiente? Por que no cambiar el rumbo antes de dormir? Si me dormía con un pensamiento positivo con una sonrisa dibujada en el rostro, mis subconsciente trabajaría toda la noche y al día siguiente sin ningún esfuerzo empezaría no solo de cero sino de diez.

El resultado fue sorprendente. Y se ha convertido en uno de esos pequeños motores de mi vida. A la mañana siguiente no solo me desperté, contento, feliz, con ganas de comerme el mundo. Algo aún más mágico había sucedido. Descubrí una sonrisa dibujada en mi rostro incluso antes de abrir los ojos…

Descubrí que el último pensamiento del día es el que inspira el primer pensamiento del día siguiente. Desde ese día cada noche un pensamiento positivo recorre mi mente justo antes de dormir, a veces incluso me duermo con la sonrisa dibujada en mi rostro. Ese pensamiento no es siempre el mismo. Pero siempre sigue el mismo patrón, es inspirador, motiva y sobre todo siempre me saca una sonrisa.

Por eso os invito a que probéis y encontréis el vuestro. Y que así todos podáis vivir y compartir

«La magia de despertarte sonriendo…»